Un conocido campeón de dobles enfrenta una suspensión que sacude el deporte. ¿Inocencia o negligencia? Descúbrelo a continuación.
El día de hoy, el mundo del tenis recibió la noticia de la suspensión provisional de Max Purcell, destacado jugador australiano y 12° en el ranking de dobles a nivel mundial, tras haber admitido el uso de un método de dopaje prohibido.
La Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) difundió un comunicado afirmando que Purcell había aceptado voluntariamente someterse al Programa de Antidopaje de Tenis (TADP) reconociendo haber infringido el artículo 2.2 referido al consumo de sustancias o uso de métodos prohibidos. La suspensión fue efectiva a partir del 12 de diciembre de 2024.
Purcell, de 26 años, se encuentra inhabilitado para competir, entrenar o incluso asistir a eventos de tenis auspiciados o sancionados por entidades asociadas a la ITIA. Esto incluye organizaciones de la talla de la ATP, ITF, WTA y federaciones de tenis icónicas como Wimbledon y la USTA.
Las redes sociales fueron el canal elegido por Max Purcell para explicar el incidente, atribuyendo la culpa a una clínica médica. "Sin saberlo, recibí una infusión intravenosa de vitaminas por encima del límite permitido de 100 ml", argumentando desconocimiento y confianza en la clínica que debía asegurar las restricciones correspondientes a un atleta profesional.
Como consecuencia de este suceso, el tenista australiano, quien había alcanzado la gloria al ganar en dos ocasiones en Grand Slam (Wimbledon 2022 y US Open 2024), enfrenta ahora un duro golpe a su carrera. Sin embargo, muestra determinación para resolver la situación y regresar a las canchas en cuanto sea posible.